viernes, 2 de noviembre de 2012


Tema No.1

semana del 25 al 27 /09/12
Administración de medicamentos
Competencia 7
Sistema cardiovascular





CELULA ANIMAL

Membrana Celular: Es el límite externo de la célula formada por fosfolipido y su función es delimitar la célula y controlar lo que sale e ingresa de la célula.
Mitocondria: diminuta estructura celular de doble membrana responsable de la conversión de nutrientes en el compuesto rico en energía trifosfato de adenosina (ATP), que actúa como combustible celular. Por esta función que desempeñan, llamada respiración, se dice que las mitocondrias son el motor de la célula.

Cromatina: complejo macromolecular formado por la asociación de ácido desoxirribonucleico o ADN y proteínas básicas, las histonas, que se encuentra en el núcleo de las células eucarióticas.

Lisosoma: Saco delimitado por una membrana que se encuentra en las células con núcleo (eucarióticas) y contiene enzimas digestivas que degradan moléculas complejas. Los lisosomas abundan en las células encargadas de combatir las enfermedades, como los leucocitos, que destruyen invasores nocivos y restos celulares.

Aparato de Golgi: Parte diferenciada del sistema de membranas en el interior celular, que se encuentra tanto en las células animales como en las vegetales.

Citoplasma: El citoplasma comprende todo el volumen de la célula, salvo el núcleo. Engloba numerosas estructuras especializadas y orgánulos, como se describirá más adelante.

Nucleoplasma: El núcleo de las células eucarióticas es una estructura discreta que contiene los cromosomas, recipientes de la dotación genética de la célula. Está separado del resto de la célula por una membrana nuclear de doble capa y contiene un material llamado nucleoplasma. La membrana nuclear está perforada por poros que permiten el intercambio de material celular entre nucleoplasma y citoplasma.

Núcleo: El órgano más conspicuo en casi todas las células animales y vegetales es el núcleo; está rodeado de forma característica por una membrana, es esférico y mide unas 5 µm de diámetro. Dentro del núcleo, las moléculas de ADN y proteínas están organizadas en cromosomas que suelen aparecer dispuestos en pares idénticos. Los cromosomas están muy retorcidos y enmarañados y es difícil identificarlos por separado.

Nucleolo: Estructura situada dentro del núcleo celular que interviene en la formación de los ribosomas (orgánulos celulares encargados de la síntesis de proteínas). El núcleo celular contiene típicamente uno o varios nucleolos, que aparecen como zonas densas de fibras y gránulos de forma irregular. No están separados del resto del núcleo por estructuras de membrana.

Centriolos: Cada una de las dos estructuras de forma cilíndrica que se encuentran en el centro de un orgánulo de las células eucarióticas denominado centrosoma. Al par de centriolos se conoce con el nombre de diplosoma; éstos se disponen perpendicularmente entre sí.

Ribosoma: Corpúsculo celular que utiliza las instrucciones genéticas contenidas en el ácido ribonucleico (ARN) para enlazar secuencias específicas de aminoácidos y formar así proteínas. Los ribosomas se encuentran en todas las células y también dentro de dos estructuras celulares llamadas mitocondrias y cloroplastos. Casi todos flotan libremente en el citoplasma (el contenido celular situado fuera del núcleo), pero muchos están enlazados a redes de túbulos envueltos en membranas que ocupan toda la masa celular y constituyen el llamado retículo endoplasmático.

Reticulos Endoplasmaticos (RE): También retículo endoplásmico, extensa red de tubos que fabrican y transportan materiales dentro de las células con núcleo (células eucarióticas). El RE está formado por túbulos ramificados limitados por membrana y sacos aplanados que se extienden por todo el citoplasma (contenido celular externo al núcleo) y se conectan con la doble membrana que envuelve al núcleo. Hay dos tipos de RE: liso y rugoso.

RE Rugoso: La superficie externa del RE rugoso está cubierta de diminutas estructuras llamadas ribosomas, donde se produce la síntesis de proteínas. Transporta las proteínas producidas en los ribosomas hacia las regiones celulares en que sean necesarias o hacia el aparato de Golgi, desde donde se pueden exportar al exterior.

RE Liso: El RE liso desempeña varias funciones. Interviene en la síntesis de casi todos los lípidos que forman la membrana celular y las otras membranas que rodean las demás estructuras celulares, como las mitocondrias. Las células especializadas en el metabolismo de lípidos, como las hepáticas, suelen tener más RE liso.

El RE liso también interviene en la absorción y liberación de calcio para mediar en algunos tipos de actividad celular. En las células del músculo esquelético, por ejemplo, la liberación de calcio por parte del RE activa la contracción muscular.

Membrana Plasmática: La membrana plasmática de las células eucarióticas es una estructura dinámica formada por 2 capas de fosfolípidos en las que se embeben moléculas de colesterol y proteínas. Los fosfolípidos tienen una cabeza hidrófila y dos colas hidrófobas. Las dos capas de fosfolípidos se sitúan con las cabezas hacia fuera y las colas, enfrentadas, hacia dentro. Es decir, los grupos hidrófilos se dirigen hacia la fase acuosa, los de la capa exterior de la membrana hacia el líquido extracelular y los de la capa interior hacia el citoplasma.


SANGRE
Está constituida por líquido, por millones de células. La parte líquida es el plasma (uno de los tres compartimiento líquidos del organismo), y las células son los elementos figurados de la sangre.
La sangre tiene una temperatura de 38ºC, un pH entre 7,35 y 7,45, y corresponde al 8 % del peso corporal.

Las funciones de la sangre son:
1. Transporte: Capta las sustancias alimenticias y el oxígeno en los sistemas digestivo y respiratorio, y los libera en las células de todo el cuerpo. Transporta el CO2 de 3s de las células hasta los pulmones para ser eliminado. Recoge los desechos de las células y los deja en los órganos excretorios. Capta hormonas y las lleva a sus órganos blanco. Transporta  enzimas, amortiguadores y otras sustancias bioquímicas. 

2.  Regulación: del pH mediante las sustancias amortiguadoras. Además regula la  temperatura corporal, ya que puede absorber grandes cantidades de calor sin que aumente mucho su temperatura, y luego transferir eses calor absorbido desde el interior del cuerpo hacia su superficie, en donde se disipa fácilmente. Mediante la presión osmótica, regula el contenido de agua de las células, por interacción de los iones y proteínas disueltos.

3. Protección: mediante la coagulación se evita la pérdida excesiva de sangre.  Mediante la fagocitosis y la producción de anticuerpos protege contra las enfermedades

Volumen sanguíneo
Varía con cada individuo. Los factores determinantes son la edad, el tipo corporal, el sexo y  el método de medición.
Una de las principales variables que influyen en el volumen sanguíneo es la cantidad de grasa corporal. Cuanto menos grasa hay en el cuerpo, más sangre hay por kilo de peso corporal.
Un varón adulto sano posee 71 ml de sangre por kilo de peso corporal (71 ml x 70 kg = 4970ml ó 5 litros).

Plasma
Es un líquido acuoso, formado por:
91,5 % de agua
7 % son proteínas: albúmina 54%, globulinas 38%, fibrinógeno 7 %, otra 1 %,  8,5 % de solutos, 1,5 % son otros
Componentes: electrolitos, nutrientes, gases, enzimas, hormonas, amortiguadores, vitaminas,  productos de desecho

Las proteínas del plasma sanguíneo están constituidas por tres clases principales de compuestos: albúminas (54 %), globulinas (38 %) y fibrinógenos (7 %).
Estas proteínas plasmáticas son fundamentales  para la vida. Por ejemplo el fibrinógeno y una albúmina llamada protrombina son básicos en el mecanismo de coagulación de la sangre. Las globulinas funcionan como componentes esenciales del mecanismo de inmunidad: son anticuerpos circulantes. Todas las proteínas plasmáticas contribuyen a la conservación de la viscosidad normal de la sangre, de su presión osmótica y del volumen sanguíneo.
La síntesis de las proteínas ocurre en el hígado. Las células hepáticas producen toda clase de proteínas plasmáticas salvo algunas gammaglobulinas que son sintetizadas por las células plasmáticas.


 Linaje de las células sanguíneas
    


Glóbulos blancos
Los linfocitos
Son un tipo de leucocito (glóbulo blanco) comprendidos dentro de los agranulocitos. Son los leucocitos de menor tamaño (entre 7 y 15 μm), y representan del 24 a 32% del total en la sangre periférica. Presentan un gran núcleo esférico que se tiñe de violeta-azul y en su citoplasma frecuentemente se observa como un anillo periférico de color azul. Poseen un borde delgado de citoplasma que contienen algunas mitocondrias, ribosomas libres y un pequeño aparato de Golgi.
Los linfocitos son células de alta jerarquía en el sistema inmunitario, principalmente encargadas de la inmunidad específica o adquirida.
Estas células se localizan fundamentalmente en los órganos linfoides. Tienen receptores para antígenos específicos y, por tanto, pueden reconocer y responder al que se les presente. Por último, los linfocitos se encargan de la producción de anticuerpos y de la destrucción de células anormales. Estas respuestas ocurren en el interior de los órganos linfoides, los cuales, para tal propósito, deben suministrar un entorno que permita la interacción eficiente entre linfocitos, macrófagos y antígeno extraño. La principal causa de su aumento es el estrés.

Los linfocitos son células difíciles de catalogar según su morfología, por eso se recurre al uso de sus "CD" o cúmulo de diferenciación (del inglés Cluster of differentiation), los cuales son un conjunto de marcadores biológicos para la identificación celular.

Linfocitos B (bursodependientes): son los responsables de la respuesta humoral, es decir, de la producción de anticuerpos, proteínas (inmunoglobulinas) que se adhieren a un antígeno específico (al cual reconocen de manera unívoca). Son capaces de reconocer lípidos, proteínas, glúcidos.
Linfocitos T (timodependientes): Detectan antígenos proteicos asociados a moléculas del complejo mayor de histocompatibilidad (MHC 0 CMH)
Linfocitos T colaboradores (en inglés "helper") o linfocitos CD4+. Reconocen antígenos presentados por el MHC-II. Se les denomina colaboradores porque están involucrados en la activación y dirección de otras células inmunitarias.
Linfocitos T citotóxicos o linfocitos CD8+. Reconocen péptidos presentados por MHC-I y tienen capacidad lítica.
Células asesinas naturales, Natural Killer (NK) o linfocito grande granular. No tienen marcadores característicos. Participan en la inmunidad innata, con la capacidad de reconocer lo "propio" y también tienen propiedades líticas.


Presentación de antígeno.
1. Proteína invasora/antígeno
2. Macrófago/Célula presentadora de antígeno
3. Complejo antígeno: MHC II] (presentación de antígeno), activación de linfocito Th
4. Linfocito Th (cooperador)
5. Proteína invasora unido a anticuerpos de membrana
6. Linfocito B 7. Procesamiento de antígeno (MHC tipo II)
8. Complejo antígeno:MHC II (presentación de antígeno)
9. Producción de anticuerpos específicos para el antígeno
10. Activación de linfocitos B con los Th activados


Un antígeno ("anti", del griego αντι- que significa 'opuesto' o 'con propiedades contrarias' y "geno", de la raíz griega γεν, generar, producir) [que genera o crea oposición] es una sustancia que desencadena la formación de anticuerpos y puede causar una respuesta inmunitaria.1 La definición moderna abarca todas las sustancias que pueden ser reconocidas por el sistema inmune adaptativo, bien sean propias o ajenas.
Los antígenos son usualmente proteínas o polisacáridos. Esto incluye partes de bacterias (cápsula, pared celular, flagelos, fimbrias, y toxinas), de virus y otros microorganismos. Los lípidos y ácidos nucleicos son antigénicos únicamente cuando se combinan con proteínas y polisacáridos. Los antígenos no-microbianos exógenos (ajenos al individuo) pueden incluir polen, clara de huevo, y proteínas de tejidos y órganos trasplantados, o proteínas en la superficie de glóbulos rojos transfundidos.
Cada antígeno está definido por su anticuerpo, los cuales interactúan por complementariedad espacial. La zona donde el antígeno se une al anticuerpo recibe el nombre de epítopo o determinante antigénico, mientras que el área correspondiente de la molécula del anticuerpo es el paratopo.
Tolerógeno: Antígeno que invoca una no-respuesta inmune específica debido a su forma molecular. Si su forma molecular es cambiada, un tolerógeno puede convertirse en inmunógeno.
Alérgeno: Un alérgeno es aquella sustancia que causa una reacción alérgica. La acción resultante puede producirse luego de la ingestión, inhalación, inyección, o contacto con la piel.
Las células presentan los antígenos al sistema inmune mediante una molécula de histocompatibilidad. Dependiendo del antígeno presentado y del tipo de molécula de histocompatibilidad, podrían activarse diferentes tipos de leucocitos.

MONOCITOS
Son un tipo de glóbulos blancos agranulocitos. Es el leucocito de mayor tamaño, su tamaño es de 18 μm, y representa del 4 al 8% de los leucocitos en la sangre.
Como características destacables, presenta un núcleo en general arriñonado, lobulado o cerebriforme, que se tiñe irregularmente en forma de "rejilla" o reticular de color violeta-azulado. Usualmente el núcleo guarda una proporción de 2:1 en área con respecto al citoplasma que lo rodea, y muy frecuentemente presenta una depresión profunda. El citoplasma es abundante y de color gris azulado pudiendo estar acompañado de vacuolas blanquecinas.
Los monocitos se generan en la médula ósea y después viajan por la sangre, para luego emigrar a diferentes tejidos como hígado, bazo, pulmones, ganglios linfáticos, huesos, cavidades serosas, etc. Después de alrededor de 24 horas de permanecer en el torrente sanguíneo, los monocitos lo abandonan y atraviesan el endotelio de los capilares o las vénulas poscapilares hacia el tejido conectivo, donde se diferencian rápidamente a macrófagos.


Monocito rodeado de eritrocitos. Tinción de Wright.
Su principal función es la de fagocitar, es decir, comerse a diferentes microorganismos o restos celulares. Para fagocitar se tienen en cuenta diversos factores como la presencia de antígenos. No obstante, el procedimiento es sencillo, y consiste en rodear con los pseudópodos la molécula, acción que es inhibida en los casos en que el macrófago reconoce a la célula como integrante de un tejido propio del organismo, por medio de las proteínas del CMH (complejo mayor de histocompatibilidad) presentes sobre las membranas celulares

GRANULOCITOS son células de la sangre caracterizadas por los modos de colorear los orgánulos de su citoplasma, en microscopía de luz. Se les conoce como leucocitos polimorfonucleares, debido a las formas variables de núcleo que pueden presentar. Sin embargo este término suele ser mal utilizado ya que sólo es correcto para los neutrófilos y no para los basofilos ni los eosinofilos.

Hay tres tipos de granulocitos en la sangre humana:
·         Neutrófilos
·         Eosinófilos
·         Basófilos

Sus nombres derivan de las características coloraciones que adoptan por la sustancia que se utiliza para colorear los orgánulos de la célula; por ejemplo, el granulocito más abundante es el neutrófilo, cuyos orgánulos se colorean con tintes neutros o casi no adquieren el colorante. Los eosinófilos muestran una importante coloración rojiza (eosinofilia) mientras que los basófilos muestran afinidad por colorantes básicos adquiriendo una coloración azulada.

·         NEUTRÓFILOS, denominados también micrófagos o polimorfonucleares (PMN), son glóbulos blancos de tipo granulocito. Miden de 8.5 a 10 μm y es el tipo de leucocito más abundante de la sangre en el ser humano, representando en torno al 45-75% de los mismos. Su periodo de vida media es corto, durando horas o algunos días. Su función principal es la fagocitosis de bacterias y hongos.
Se llaman neutrófilos porque no se tiñen con colorantes ácidos ni básicos, por lo que su citoplasma se observa rosa suave. Se caracterizan por presentar un núcleo con cromatina compacta segmentada multilobulado de 2 a 5 lóbulos conectados por delgados puentes.
En neutrófilos inmaduros el núcleo se presenta sin segmentar, como una banda fuertemente teñida. Su citoplasma contiene abundantes gránulos finos color púrpura, (con el colorante Giemsa) que contienen abundantes enzimas líticas, así como una sustancia antibacteriana llamada fagocitina, todo esto necesario para la lucha contra los gérmenes extraños.
Es una célula muy móvil y su consistencia gelatinosa le facilita atravesar las paredes de los vasos sanguíneos para migrar hacia los tejidos, ayudando en la destrucción de bacterias y hongos y respondiendo a estímulos inflamatorios. A este fenómeno se le conoce como diapédesis.
Los neutrófilos normalmente se encuentran en el torrente sanguíneo. Empero, durante el inicio agudo de la inflamación, particularmente como resultado de infección bacteriana, son unos de los primeros migrantes hacia el sitio de inflamación (primero a través de las arterias, después a través del tejido intersticial), dirigidos por señales químicas como interleucina-8 (IL-8), interferón-gamma (IFN-γ), en un proceso llamado quimiotaxis. Son las células predominantes en el pus.
La liberación de los neutrófilos desde los vasos sanguíneos está condicionada por la liberación de histamina (liberada por mastocitos) y TNF-α (liberada por macrófagos). La TNF-α y la histamina actúan sobre las células del endotelio del vaso, haciendo que se active mediante la expresión de selectina-E. Los neutrófilos activados mediante IL-8 pueden unirse a la selectina-E mediante su ligando glucídico. De esa manera son capaces de estar presentes en tejidos en apenas 5 horas después de empezar la infección. Debido a sus funciones fagocíticas, los neutrófilos también se conocen como micrófagos, para diferenciarlos de las células fagocíticas más grandes, los macrófagos.

NEUTROFILO RODEADO DE GR

·         EOSINÓFILO es un leucocito de tipo granulocito pequeño derivado de la médula ósea, que tiene una vida media en la circulación sanguínea de 3 a 4 días antes de migrar a los tejidos en donde permanecen durante varios días. Su desarrollo en la médula ósea es estimulado por diversas interleucinas, como la IL-5, la IL-3 y el factor estimulante de colonias granulocito-macrófago. Es característico su núcleo bilobulado, al igual que sus distintivos gránulos citoplásmicos. Estas proteínas granulares son responsables de muchas funciones proinflamatorias, principalmente en la patogénesis de las enfermedades alérgicas, como célula efectora de hipersensibilidad inmediata, así como en la muerte de parásitos. Una de las enzimas más importantes que contienen sus gránulos es la histaminasa, que se encarga de hidrolizar la histamina, regulando así la respuesta alérgica.


·         BASÓFILO.
Son un tipo de leucocito, el menos abundante. Tiene núcleo irregular, difícil de ver por la granulación basófila que lo cubre casi siempre. Tamaño semejante al de los segmentados.Se denomina basófilo a cualquier célula que se tiñe fácilmente con colorantes básicos (hematoxilina principalmente). Sin embargo, cuando se emplea este término sin ninguna aclaración adicional, suele referirse a uno de los tipos de leucocitos (glóbulos blancos de la sangre) de la familia de los granulocitos.
En las micrografias electrónicas se ven con claridad un pequeño aparato de Golgi, algunas mitocondrias, un extenso RER y pequeñas inclusiones de glucógeno.
Los gránulos de los basófilos son gruesos pero escasos. Son células de unos 10 μm de diámetro y su núcleo tiene una forma que recuerda a una S, su núcleo es globulado y se divide de 1 a 3 células. Se originan en el mismo lugar que el resto de los granulocitos (médula ósea), y son los menos numerosos, ya que constituyen sólo el 0,5% del total.1 Son muy parecidos a los mastocitos o células cebadas, pero no son el mismo tipo celular, ni se diferencian a ellos.
Tienen una activa participación en la respuesta inmunitaria, a través de la liberación de histamina, serotonina en bajas concentraciones, y otras sustancias químicas.
Tiene gránulos de dos clases:
Gránulos azurófilos: Contienen lisosomas, que a su vez estos contienen hidrolasas ácidas.
Gránulos específicos o secundarios: contienen histamina (vasodilatador), heparán sulfato (vasodilatador), heparina (anticoagulante) y leucotrienos (hacen contraer el músculo liso de las vías aéreas).
Los basofilos además de poseer gránulos en su interior, poseen receptores de IgE (inmunoglobulina E), aquella inmunoglobulina relacionada con las alergias. Es por eso que el basófilo participa en la respuesta inflamatoria.

El sistema circulatorio posee como función el distribuir los nutrientes, oxigeno a las células y recoger los desechos metabólicos que se han de eliminar después por los riñones, en la orina, y por el aire exalado en los pulmones, rico en dióxido de carbono (CO2). De toda esta labor se encarga la sangre, que está circulando constantemente. Además, el aparato circulatorio tiene otras destacadas funciones: interviene en las defensas del organismo, regula la temperatura corporal.










Este es un capilar sanguíneo por cuyo interior circulan glóbulos rojos. Además de suministrar oxígeno a todos los tejidos del cuerpo gracias a los glóbulos rojos, retirando el CO2 que se produce en la respiración celular hacia los pulmones, la sangre tiene otras funciones. Transporta las hormonas producidas por el Sistema Endocrino, así como las moléculas sencillas que se obtienen tras la digestión del alimento.
La sangre es el fluido que circula por todo el organismo a través del sistema circulatorio, formado por el corazón y un sistema de tubos o vasos, los vasos sanguíneos.
La sangre describe dos circuitos complementarios llamados circulación mayor o general y menor o pulmonar
La  sangre es un tejido líquido, compuesto por agua y sustancias orgánicas e inorgánicas (sales minerales) disueltas, que forman el plasma sanguíneo y tres tipos de elementos formes o células sanguíneas: glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas. Una gota de sangre contiene aproximadamente unos 5 millones de glóbulos rojos, de 5.000 a 10.000 glóbulos blancos y alrededor de 250.000 plaquetas.




Los glóbulos rojos, también denominados eritrocitos o hematíes, se encargan de la distribución del oxígeno molecular (O2). Tienen forma de disco bicóncavo y son tan pequeños que en cada milímetro cúbico hay cuatro a cinco millones, midiendo unas siete micras de diámetro. No tienen núcleo, por lo que se consideran células muertas. Los hematíes tienen un pigmento rojizo llamado hemoglobina que les sirve para transportar el oxígeno desde los pulmones a las células. Una insuficiente fabricación de hemoglobina o de glóbulos rojos por parte del organismo, da lugar a una anemia, de etiología variable, pues puede deberse a un déficit nutricional, a un defecto genético o a diversas causas más.
Las plaquetas son fragmentos de células muy pequeños, sirven para taponar las heridas y evitar hemorragias.

El corazón es un órgano que posee cavidades, similar al tamaño del puño, encerrado en la cavidad torácica, en el centro del tórax en un lugar denominado mediastino, entre los pulmones, sobre el diafragma, dando nombre a la "entrada" del estómago o cardias.   Histológicamente en el corazón se distinguen tres capas de diferentes tejidos que, del interior al exterior se denominan endocardio, miocardio y pericardio. El endocardio está formado por un tejido epitelial de revestimiento que se continúa con el endotelio del interior de los vasos sanguíneos. El miocardio es la capa más voluminosa, estando constituido por tejido muscular de un tipo especial llamado tejido muscular cardíaco. El pericardio envuelve al corazón completamente.

El corazón está dividido en dos mitades que no se comunican entre sí: una derecha y otra izquierda, La mitad derecha siempre contiene sangre pobre en oxígeno, procedente de las venas cava superior e inferior, mientras que la mitad izquierda del corazón siempre posee sangre rica en oxígeno y que, procedente de las venas pulmonares, será distribuida para oxigenar los tejidos del organismo a partir de las ramificaciones de la gran arteria aorta. En algunas cardiopatías congénitas persiste una comunicación entre las dos mitades del corazón, con la consiguiente mezcla de sangre rica y pobre en oxígeno, al no cerrarse completamente el tabique interventricular durante el desarrollo fetal.

Las flechas blancas indican el flujo normal de la sangre.
Partes:1.-Aurícula derecha                                    8.-Válvula sigmoidea aórtica2.-Aurícula izquierda                                9.-Ventrículo izquierdo3.-Vena cava superior                              10.-Ventrículo derecho4.-Arteria Aorta                                          11.-Vena cava inferior5.-Arteria pulmonar                                  12.-Válvula tricúspide6.-Vena pulmonar                                       13.-Válvula sigmoidea pulmonar 
7.-Válvula mitral o bicúspideMiocardio (parte rosa)→Epicardio (capa exterior del miocardio)→Endocardio (capa interior al miocardio)


Cada mitad del corazón presenta una cavidad superior, la aurícula, y otra inferior o ventrículo, de paredes musculares muy desarrolladas. Exiten, pues, dos atrios o aurículas: derecha e izquierda, y dos ventrículos: derecho e izquierdo. Entre la aurícula y el ventrículo de la misma mitad cardiaca existen unas válvulas llamadas válvulas atrioloventriculares (tricúspide y mitral, en la mitad derecha e izquierda respectivamente) que se abren y cierran continuamente, permitiendo o impidiendo el flujo sanguíneo desde el ventrículo a su correspondiente atrio. Cuando las gruesas paredes musculares de un ventrículo se contraen (sístole ventricular), la válvula atrioventricular correspondiente se cierra, impidiendo el paso de sangre hacia la aurícula, con lo que la sangre fluye con fuerza hacia las arterias. Cuando un ventrículo se relaja, al mismo tiempo la aurícula se contrae, fluyendo la sangre por esta sístole auricular y por la abertura de la válvula auriculoventricular. Como una bomba, el corazón impulsa la sangre por todo el organismo, realizando su trabajo en fases sucesivas. Primero se llenan las cámaras superiores o aurículas, luego se contraen, se abren las válvulas y la sangre entra en las cavidades inferiores o ventrículos. Cuando están llenos, los ventrículos se contraen e impulsan la sangre hacia las arterias. El corazón late unas setenta veces por minuto y bombea todos los días unos 10.000 litros de sangre.
El corazón tiene dos movimientos : 
Uno de contracción llamado sístole y otro de dilatación llamado diástole. Pero la sístole y la diástole no se realizan a la vez en todo el corazón, se distinguen tres tiempos :
Sístole Auricular : se contraen las aurículas y la sangre pasa a los ventrículos que estaban vacíos.
Sístole Ventricular : los ventrículos se contraen y la sangre que no puede volver a las aurículas por haberse cerrado las válvulas bicúspide y tricúspide, sale por las arterias pulmonar y aorta. Estas también tienen, al principio, sus válvulas llamadas válvulas sigmoideas, que evitan el reflujo de la sangre.
Diástole general : Las aurículas y los ventrículos se dilatan, al relajarse la musculatura, y la sangre entra de nuevo a las aurículas.
Los golpes que se producen en la contracción de los ventrículos originan los latidos, que en el hombre oscilan entre 70 y 80 latidos por minuto.

Durante los períodos de reposo el corazón tiene aproximadamente 70 pulsaciones por minuto en un individuo adulto del sexo masculino, y en este mismo intervalo bombea aproximadamente cinco litros de sangre. El estímulo que mantiene este ritmo es completamente autorregulado. Incrustada en la aurícula derecha se encuentra una masa de tejido cardíacos especializados que recibe el nombre dnodo sinusal o ganglio senoauricular (SA). Este nodo SA (donde se origina el destello en la imagen que ves) ha sido a veces denominado"el marcapaso del corazónpor cuanto establece el ritmo básico de las pulsaciones de este órgano. Las fibras del músculo cardíaco, como todas las células, presentan exteriormente una carga eléctrica positiva y una carga eléctrica negativa en el interior . En el "marcapasos" se produce una descarga espontánea setenta veces por cada minuto. Esto, a la vez, produce la descarga en las fibras musculares circundantes de la aurícula; a su turno, esto causa una tenue onda eléctrica que recorre las aurículas y hace que estas se contraigan. Cuando la corriente llega a los islotes de tejido conjuntivo que separan las aurículas y los ven trículos, es absorbida por el ganglio auriculoventricular (A-V). Este se comunica con un sistema de fibras ramificadas que llevan la corriente a todas las regiones de los ventrículos, los que entonces se contraen vigorosamente. Esta contracción recibe el nombre de sístole.  Ver explicación con gráfico animado 
Los vasos sanguíneos (arterias, capilares y venas) son conductos musculares elásticos que distribuyen y recogen la sangre de todos los rincones del cuerpo. Se denominan arterias a aquellos vasos sanguíneos que llevan la sangre, ya sea rica o pobre en oxígeno, desde el corazón hasta los órganos corporales. Las grandes arterias que salen desde los ventrículos del corazón van ramificándose y haciéndose más finas hasta que por fin se convierten en capilares, vasos tan finos que a través de ellos se realiza el intercambio gaseoso y de sustancias entre la sangre y los tejidos. Una vez que este intercambio sangre-tejidos a través de la red capilar, los capilares van reuniéndose en vénulas y venas por donde la sangre regresa a las aurículas del corazón.
Los Capilares son vasos muy finos en que se dividen las arterias y que penetran por todos los órganos del cuerpo, al unirse de nuevo forman las venas.

Las Arterias: Son vasos gruesos y elásticos que nacen en los ventrículos, aportan sangre a los órganos del cuerpo por ellas circula la sangre a presión debido a la elasticidad de las paredes. Del corazón salen dos Arterias : 1) El tronco pulmonar que sale del ventrículo derecho y lleva la sangre a los pulmones y 2) La aorta que sale del ventrículo izquierdo forma el arco aórtico (cayado) del cual emergen arterias para cabeza, cuello y miembros superiores, desciende como aorta tóracica y al atravesar diafragma cambia a aorta abdominal que irriga las estructuras abdominales. Finalmente se divide en dos arterias ilíacas. De la aorta se originan las siguientes ramas:
Las carótidas: Aportan sangre oxigenada a la cabeza.
Subclavias: Aportan sangre oxigenada a los miembros superiores.
Hepática: Aporta sangre oxigenada al hígado.
Esplénica: Aporta sangre oxigenada al bazo.
Mesentéricas: Aportan sangre oxigenada al intestino.
Renales: Aportan sangre oxigenada a los riñones.
Ilíacas: Aportan sangre oxigenada a los miembros inferiores.
Tronco Celíaco: Es un arteria de la aorta abdominal que se trifurca para dar irrigación al estómago, hígado y bazo.
Miembros Superiores: de la subclavia se forma las axilar que se transforma en braquial y ésta en radial y ulnar que se unen en mano formando los arcos arteriales.
Miembros Inferiores: de la ilíaca externa se forma la femoral que se continua como tibial y fibular.
Los Capilares: Son vasos sumamente delgados en que se dividen las arterias y que penetran por todos los órganos del cuerpo, al unirse de nuevo forman las venas.
Las Venas: Son vasos de paredes delgadas y poco elásticas que recogen la sangre y la devuelven al corazón, desembocan en los atrios. En el atrio derecho desembocan :
La Cava superior formada por la unión de las venas braquicefálicas: yugulares que vienen de la cabeza y las subclavias que proceden de los miembros superiores (venas braquiales, cefálica y basílica).
La Cava inferior a la que van las Ilíacas que vienen de los miembros inferiores (venas femorales, safena magna o interna y safena parva o externa), las renales de los riñones, la suprahepática del hígado y genitales.

El Sistema Linfático
La linfa es un líquido incoloro formado por plasma sanguíneo y por glóbulos blancos, en realidad es la parte de la sangre que se escapa o sobra de los capilares sanguíneos al ser estos porosos.
Los vasos linfáticas tienen forma de rosario por las muchas válvulas que llevan, también tienen unos abultamientos llamados linfonodos o ganglios linfáticos que se notan sobre todo en las axilas, ingle, cuello etc. En ellos se originan los glóbulos blancos. El sistema linfático sirve de transporte a los ácidos grasos, defensas y regulación de los líquidos extracelulares.




EL SISTEMA LINFÁTICO
es la estructura anatómica que transporta la linfa unidireccionalmente hacia el corazón, y es parte del aparato circulatorio. En el ser humano, está compuesto por los vasos linfáticos, los ganglios, los órganos linfáticos o linfoides (el bazo y el timo), los tejidos linfáticos (como la amígdala, las placas de Peyer y la médula ósea) y la linfa.
El sistema linfático está considerado como parte del aparato circulatorio porque está formado por los vasos linfáticos, unos conductos parecidos a los vasos sanguíneos, que transportan un líquido llamado linfa, que proviene de la sangre y regresa a ella. Este sistema constituye por tanto la segunda red de transporte de líquidos corporales.
La linfa es un líquido transparente que recorre los vasos linfáticos y generalmente carece de pigmentos. Se produce tras el exceso de líquido que sale de los capilares sanguíneos al espacio intersticial o intercelular, siendo recogida por los capilares linfáticos, que drenan a vasos linfáticos más gruesos hasta converger en conductos que se vacían en las venas subclavias.
El sistema linfático cumple cuatro funciones básicas:
El mantenimiento del equilibrio osmolar en el "tercer espacio".
Contribuye de manera principal a formar y activar el sistema inmunitario (las defensas del organismo).
Recolecta el quilo a partir del contenido intestinal, un producto que tiene un elevado contenido en grasas.
Controla la concentración de proteínas en el intersticio, el volumen del líquido intersticial y su presión.

Los ganglios linfáticos son unas estructuras nodulares que forman agrupaciones en forma de racimos. Son una parte importante del sistema inmunitario, ayudando al cuerpo a reconocer y combatir gérmenes, infecciones y otras sustancias extrañas. Son más numerosos en las partes menos periféricas del organismo. Su presencia se pone de manifiesto fácilmente en partes accesibles al examen físico directo en zonas como axilas, ingle, cuello, cara, huecos supraclaviculares y huecos poplíteos. Los conductos linfáticos y los nódulos linfoideos se disponen muchas veces rodeando a los grandes troncos arteriales y venosos aorta, vena cava, vasos ilíacos, subclavios, axilares, etc. Son pequeñas bolsas que se encuentran entre los vasos linfáticos en estos se almacenan los glóbulos blancos, más concretamente los linfocitos.

Tejidos y órganos linfáticos
En el ser humano, los órganos linfáticos o linfoideos del sistema linfático son el bazo y el timo; y los tejidos linfáticos o linfoideos son la amígdala, las placas de Peyer, los ganglios linfáticos y la médula ósea.
El bazo tiene la función de filtrar la sangre y limpiarla de formas celulares alteradas y, junto con el timo y la médula ósea, cumplen la función de madurar a los linfocitos, que son un tipo de leucocito.
Cuando la presión sanguínea aumenta dentro de los vasos capilares, el plasma sanguíneo tiende a difundirse a través de las paredes de los capilares, debido a la gran presión que se ejerce sobre estas paredes. Durante este proceso se pierde gran cantidad de nutrientes y biomoléculas que son transportados por medio de la sangre, creando con esto una descompensación en la homeostasis; es en este instante en donde toma una importancia radical el sistema linfático, ya que se encarga de recolectar todo el plasma perdido durante la presión sanguínea y hacer que retorne a los vasos sanguíneos manteniendo, de esta forma, la homeostasis corporal.

Patologías del sistema linfático
Las manifestaciones más comunes de enfermedad del sistema linfático son:
La presencia de adenopatías (hinchazón de los ganglios)
La aparición de una forma de edema conocido como linfedema
Edema linfodinámico Aumento de carga linfática por trastornos circulatorios (cardiacos, renal, pre menstrual, traumatismo, quemaduras.)
Edema linfostático o linfedema: Es el aumento de proteína y líquido intersticial; fallo linfático.
Lipidema: Síndrome de piernas grasosas (tobillo, piernas y cadera).
Mixedema: Acumulación de mucopolisacáridos y proteínas especio intersticial, alteraciones glandulares tiroides (cara, nuca, dorso de las manos y de los pies).
La linfangitis por una herida punzante en el sistema linfático.
Cáncer: El cáncer del sistema linfático se llama linfoma.

No hay comentarios:

Publicar un comentario